Desde luego es una de mis tareas pendientes y no se cuándo me voy a poner a ello, sobre todo, porque reorganizar todos los posts me va a llevar bastante. Así que, si estás a punto de crear tu blog o todavía no has escrito demasiados artículos (incluso si lo has hecho como yo) sería bueno que tuvieras en cuenta los siguientes consejos para crear categorías:
1. Las categorías deben ser descriptivas
Normalmente las categorías ayudan a nuestros nuevos visitantes a explorar de una manera más profunda nuestro blog. Si no se lo ponemos fácil y conseguimos que accedan al contenido que más les pueda interesar de una manera rápida es bastante probable que se vayan tan rápido como han llegado.
Las palabras de las categorías no sólo deben ser claras para nuestro lectores, sino que además parece una buena idea que también lo sean para los buscadores y no sería mala idea usar términos de búsqueda.
2. Utilízalas como una tabla de contenidos, no como un índice
Uno de los mayores errores que se suelen cometer al crear categorías es el de hacerlas demasiado específicas. Sin llegar al punto de construir una lista de categorías demasiado generales sí parece una buena idea agrupar temas relacionados en una misma categorización en lugar de hacerlas más concretas.
Imagina el caso de un blog de coches que tiene una sección dedicada a los modelos diesel. Parece más lógico agrupar todos los que reunan esa característica en una categoría denominada “Diesel” que crear distintas categorías en función de sus caballos “Diesel 120cv”, “Diesel 140cv”.
3. Que la lista sea corta
Es un error común crear una categoría nueva cada vez que se escribe un post. Incluso si tienes un blog variado es factible crear una estructura fija de categorías que abarquen todos los temas de los que vas a hablar.
En primer lugar los lectores agradecerán no tener que recorrer una lista de 30 temas hasta encontrar el que les interese. En segundo lugar hay teorías (sin demostrar) que sostienen que parece más favorable en términos de buscadores, disponer de una categoría con 20 posts relacionados que veinte distintas.
4. Incluye tus posts en una sóla categoría
No hay unanimidad respecto a este punto. Por un lado se sostiene que parece más lógico que cada categoría disponga de sus propios posts con la idea de evitar al lector encontrar los mismos artículos en diferentes sitios. Además, existe la posibilidad de que Google crea que se trata de contenido duplicado con el consiguiente perjuicio para nuestro blog.
Por otro lado, también es cierto que puede que determinados posts encanjen perfectamente en distintas categorías, pero no es tan habitual y si mantienes una buena estructura de categorías, tampoco necesario.
5. Piensa antes de crear una nueva categoría
Ya tienes tu lista de categorías perfectamente elaborada, pero un día escribes un post que no sabes donde encajar. La solución suele estar en crear una nueva categoría pero, ¿vas a escribir más posts que puedas agrupar en ella?
Es decir, crear una categoría que solo vaya a estar compuesta por un par de posts no es una buena idea. A los ojos del lector dará la sensación de que, o bien no te interesa mucho el tema o no tienes ni idea. Antes de crearla, por tanto, analiza bien si puedes reubicar el post en otro sitio o si seguirás escribiendo más artículos relacionados.
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